Desde este martes 1 de octubre, cerca de 50,000 trabajadores pertenecientes a la Asociación Internacional de Estibadores (ILA, por sus siglas en inglés) que se encargan de la carga y descarga de mercancías abandonaron sus puestos de trabajo, con lo cual se paralizan las actividades portuarias de movimiento de carga tanto para importación como exportación.
La paralización coincide con el inicio de la temporada de mayor demanda, cuando el comercio internacional suele generar gran movimiento de carga marítima y llegada de buques por el despacho de mercancía desde Asia hacia la Costa Este de EEUU para surtir de inventario para las ventas del Black Friday y el fin de año.
Harold Daggett, presidente de ILA, dijo que la Alianza Marítima de los Estados Unidos (USMX) que representa a la industria, continúa bloqueando el camino hacia un acuerdo sobre un nuevo Contrato Maestro al rechazar las demandas de los trabajadores por lo que activaron la huelga en todos los puertos desde Maine hasta Texas.
“Los transportistas marítimos representados por USMX quieren disfrutar de las ricas ganancias de miles de millones de dólares que obtendrán en 2024, mientras ofrecen a los trabajadores portuarios de ILA un paquete salarial inaceptable que rechazamos”, dijo la ILA en un comunicado.
Daggett advirtió que la huelga tendrá un impacto en todo el comercio de EEUU porque al no descargarse los barcos no habrá autos que vender y las tiendas se quedarán sin mercancía procedente de China y otros mercados de Asia.
Algunos de los puertos afectados son los de Houston, Baltimore, Nueva York, Savannah, Boston o Charleston.
Impacto en Panamá
El sector logístico y portuario panameño está atento al impacto que pueda tener esta huelga que arrancó por parte de los estibadores de la Costa Este y el Golfo de EEUU.
Gran parte de los buques y la mercancía que llega a esa zona de Estados Unidos pasa por el Canal de Panamá y hay navieras que pueden verse afectadas y recurran al mercado panameño bien sea para redireccionar la carga o para distribuirla a otros puertos.
El presidente del Consejo Empresarial Logístico (COEL), Daniel Isaza, dijo que el impacto puede ser negativo y positivo a la vez, según las medidas que implementen algunos operadores y navieras con su carga.
“Desde el punto de vista negativo, mucha carga que iba a salir de Asia quizás se retenga un poco, demore en salir y no pasará por los puertos panameños ni por el Canal. Entonces si el Canal cobra un peaje por tonelada, va a tener menos tonelaje pasando y económicamente hay un impacto”, indicó.
Puntualmente, dijo que el inventario de mercancía de China a Panamá llega por dos vías, de forma directa a los puertos locales o en Los Ángeles en la Costa Oeste que no se ve impactada por esta huelga, y de allí se distribuye a mercados como el panameño y de Latinoamérica como el caso de piezas y partes automotrices.
Isaza mencionó que desde el punto de vista positivo, Panamá puede potenciar su rol como un jugador importante como plataforma logística para los centros de distribuciones regionales, puede ofrecer un servicio a las empresas que están en la Costa Este y en el área del Golfo para que instalen bodegas en el país.
“Ya hay empresas de esa zona que han mudado bodegas a Panamá debido a los altos costos que se registran en EEUU, con esa huelga otras compañías podrían analizar esa posibilidad para cambiar su logística de distribución desde Panamá en lugar de la Florida y Nueva York”, agregó el presidente de COEL.
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