La histórica movilización comenzará este viernes a partir de las 17 en Plaza de Mayo bajo la consigna «Una memoria que arde. Una lucha que no se apaga». La marcha durará 24 horas y finalizará en frente a la Casa Rosada el sábado a las 17.
El comunicado lleva la firma de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Abuelas, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, H.I.J.O.S. Capital, HIJOS Provincia de Buenos Aires, CELS (Centro de Estudios Legales y Sociales), APDH, la APDH La Matanza, La Liga Argentina por los Derechos Humanos, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, MEDH (Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos), Familiares y compañeros de los 12 de la Santa Cruz, entre muchos otros.
También se incluyen las dos CTA, ATE Capital (uno de los principales impulsores), la Asociación Bancaria, UTEP (Unión de Trabajadores de la Economía Popular), La Cámpora y el Partido Comunista.
El texto advierte que «no podemos permitir que avance un gobierno que pretende cercenar libertades y derechos, que ataca a trabajadores y trabajadoras, ajusta a los sectores más vulnerables mientras los más poderosos incrementan sus fortunas, profundiza la desigualdad y amenaza a quienes no se alinean con sus políticas de odio».
Uno de los gremios que más pugnó por reorganizar la marcha de la resistencia fue ATE Capital que conduce Daniel «Tano» Catalano. El lunes pasado lanzó la convocatoria bajo la consigna «¡Ni un paso atrás, la patria se defiende!». A través de un comunicado la agrupación de trabajadores del Estado recordó el origen de la manifestación como herramienta creada por las Madres de Plaza de Mayo en plena dictadura -en 1981- para reclamar la aparición con vida de los desaparecides e invitó a resignificar el concepto de resistencia “frente a un gobierno negacionista y apologista de la dictadura, que promueve discursos de odio, niega identidades y busca anularnos”.
“Hay una memoria que arde y ese ardor tiene que ver con que hay una lucha que no se va a apagar”, amplió Daniel Catalano, secretario general de la agrupación gremial, en diálogo con Página|12.
Entre principios de 2024 y la actualidad, la gestión (del presidente Javier) Milei con Alberto Baños al frente de la Secretaría de Derechos Humanos redujo la planta de trabajadores del área a la mitad, vació de trabajadores a los espacios de Memoria, cerró el Centro Cultural Haroldo Conti sin nuevo aviso de reapertura y echó a un tercio de les abogados que representan querellas de la secretaría en juicios de lesa humanidad.
Ahora recurrió a un amparo judicial para evitar que se realizara un recital del trapero Milo J al tiempo que bajaba la gigantografía del día en que Néstor Kirchner ordenó bajar el cuadro del genocida Jorge Rafael Videla.
En ese sentido, la Marcha de la Resistencia a la que convocan para este viernes y sábado es, según el dirigente, “la respuesta frente a un gobierno que nos está atacando en todos los planos, a la política de derechos humanos, a la política de salud, a las políticas sociales, fomentando el odio el presidente con sus discursos en Davos y en redes sociales contra la militancia zurda y de las diversidades, vulnerando derechos. Es criminal este gobierno, pero vamos a resistir”.
La iniciativa surgió de una reunión que se llevó a cabo el martes 4 de febrero en la sede de Madres de Plaza de Mayo de la Línea Fundadora y de la participó ATE y otros gremios, además de espacios sociales y políticos. “Ahí propusimos tomar la Marcha de la Resistencia como herramienta con una gran potencia para resignificar en estos tiempos y desde varios ámbitos”, explicó Catalano, y completó: “Pensamos generar una acción política de coordinación para ofrecerle a la sociedad la posibilidad de reorganizarse en torno de una de las banderas más importantes de nuestra democracia, la de la memoria, la verdad y la justicia y demostrar que la lucha no se termina”.
En tanto, la Asociación Bancaria que conduce el también diputado nacional Sergio Palazzo, anunció su participación. En un comunicado el gremio recordó que la movilización es necesaria porque «nos encontramos ante el intento sistemático de borrar las marcas de la Memoria y profundizar la desigualdad social» y afirma que, «frente al negacionismo y la apología de la dictadura que impulsa el gobierno de Javier Milei, las y los trabajadores organizados resistimos y sostenemos el legado de las Madres».