Por Manu Pineda, Secretario de Relaciones Internacionales del PCE

   En primer lugar, deseo trasladar un saludo fraternal, en nombre del Partido Comunista de España, al Partido Comunista Libanés, agradeciéndoles sinceramente por la organización de esta jornada de solidaridad con Palestina y su heroica resistencia. Esta iniciativa es una muestra clara y viva de internacionalismo proletario, del que tanto necesitamos hoy.

   Nos encontramos ante la más criminal expresión del colonialismo supremacista encarnado por la entidad sionista, sostenida política, económica y militarmente por el imperialismo estadounidense. En Gaza, desde hace casi dos años, se desarrolla una operación de exterminio que se transmite en directo a través de redes y televisiones. No solo vemos el dolor de las víctimas, sino también la impunidad de unos criminales que se saben protegidos por el imperialismo norteamericano y la complicidad de la Unión Europea.

   La población gazatí está siendo sometida a bombardeos incesantes que asesinan a civiles y destruyen hospitales, escuelas y toda la infraestructura vital. A ello se suma una hambruna histórica, reconocida por Naciones Unidas el 22 de agosto de 2025, siendo la primera vez que se declara formalmente fuera del continente africano. Cada diez minutos muere un niño por hambre, sed o heridas no tratadas.

   Mientras tanto, el régimen genocida israelí ha puesto en marcha la operación de invasión y “limpieza” de la Ciudad de Gaza, donde aún sobreviven 900.000 personas de los 2,3 millones que malviven en la Franja y que no tienen adónde desplazarse.

   El régimen sionista ataca deliberadamente a periodistas, personal sanitario, trabajadores humanitarios y colectivos especialmente protegidos por el derecho internacional, con el objetivo de silenciar la verdad y quebrar la resistencia. Además, extiende sus agresiones más allá de Palestina, atacando al Líbano, Siria, Yemen, Iraq, Irán y Qatar, en el marco de su proyecto colonial conocido como el “Gran Israel”.

   En el plano jurídico, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) ha reconocido el carácter genocida de esta operación de exterminio y ha ordenado la detención inmediata de estos crímenes. El Tribunal Penal Internacional (TPI) ha emitido órdenes de arresto contra Netanyahu y su exministro Gallant por crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.

   Asimismo, la International Association of Genocide Scholars (IAGS) ha concluido que las acciones del régimen sionista cumplen plenamente con la definición legal de genocidio establecida en la Convención de 1948.

   Camaradas, la causa palestina es la causa de toda la humanidad. En Palestina se libra una batalla decisiva por el respeto al derecho internacional, la soberanía de los pueblos y la justicia. Frente a quienes imponen la ley del más fuerte, los comunistas no podemos permanecer pasivos. Nunca lo hicimos en el pasado, y no debemos hacerlo ahora.

   Es el momento de coordinar nuestros esfuerzos, de elevar nuestra voz y actuar con firmeza y eficacia. Debemos impulsar y participar en todas las movilizaciones contra el genocidio, exigir a nuestros gobiernos la ruptura inmediata de relaciones con la entidad terrorista israelí y la imposición de un embargo total de armas.

   El pueblo palestino resiste, nos mira y nos necesita. No podemos fallarle.