Somos amigos de la paz, condenamos la injerencia, luchamos contra la pobreza, el cambio climático y por esa razón nos unimos el pasado 8 de enero al ALBA-TCP, anunció el mandatario caribeño en su intervención durante la XXIII Cumbre que reunió a jefes de Estado del continente.
Durante el cónclave, Pierre rechazó las sanciones contra Cuba y Venezuela por considerarlas “injustas, innecesarias, deben ser eliminadas en todos los países” y, en el caso de la crisis en Haití, extendió un llamado al cese de hostilidades en esa nación, pues subrayó que sus ciudadanos “tienen el derecho de existir, de vivir”.
Asimismo, abogó por reforzar la seguridad alimentaria entre las naciones miembros, así como la interconexión aérea a nivel regional al considerar ambos aspectos de alta importancia para los estados insulares, en tanto ratificó que el organismo puede contar con la participación de Santa Lucía en todas las acciones para la supervivencia y avance regionales.
Recordó la necesidad de avanzar en las negociaciones con la aerolínea Conviasa para establecer rutas regulares entre los principales destinos e impulsar la industria turística junto a Barbados, San Vicente y las Granadinas, Bolivia y Venezuela mientras deseó éxito al presidente venezolano, Nicolás Maduro, en las próximas elecciones. Durante el encuentro de líderes del ALBA-TCP, los debates se centraron en torno a la Agenda Estratégica 2030, la cual pauta el camino a seguir en la búsqueda del desarrollo de los países miembros en los próximos años, especialmente en áreas claves desde el punto de vista social, económico, político y cultural.