«La flexión de músculos que hace Rusia con el anuncio de estos ejercicios militares es para recordarle a Europa que esto no es un juego, y que evidentemente, si Europa desea escalar el conflicto y está dispuesta a involucrarse directamente, Rusia está lista para tener en la mira a los distintos actores», dijo a Sputnik Alejandro Salgó, catedrático de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y experto en Relaciones internacionales y conflictos contemporáneos.
Este 6 de mayo, el Ministerio de Defensa de Rusia informó sobre el comienzo de los preparativos para un ejercicio militar con armas nucleares no estratégicas.
Las maniobras tienen por objetivo el mantenimiento de la capacidad militar tanto del personal como de los equipos relativos al «uso de combate de las armas nucleares no estratégicas».
El ejercicio se realiza para «garantizar la integridad territorial y la soberanía de Rusia en respuesta a las declaraciones provocativas y amenazas de funcionarios occidentales individuales» contra el país.
La fragilidad de Europa sin EEUU
Para el maestro Salgó, se trata de un mensaje dirigido a políticos que han entablado discursos hostiles contra Moscú. Tal es el caso, dice, del presidente francés Emmanuel Macron, quien se ha referido en un par de ocasiones a la posibilidad de enviar tropas a Europa del Este.
De acuerdo con el académico, Macron utiliza el conflicto en Ucrania porque quiere recuperar el rol de Francia como el gran guía político de Europa, pero también intenta ocupar el vacío que está dejando Estados Unidos que, a decir del especialista, busca ya alejarse del conflicto y dejar a los europeos que lo resuelvan.
«Le pasa la ‘papa caliente’ a Macron y tiene que sacar una fuerza, una especie de ejército europeo, con una alianza europea, para tratar de mantener medianamente el barco a flote, y hacer que las cosas sean difíciles para Rusia», afirma Salgó.
Para el experto, la aprobación en Estados Unidos a finales de abril de un paquete de ayuda por más de 60.000 millones de dólares para Ucrania, fue una especie de despedida de Washington del conflicto ucraniano, el cual, considera el especialista, ha sido una sangría de recursos, de imagen y de armamento para el país norteamericano.
A decir del profesor Salgó, Europa quiere salvaguardar algo para que una eventual negociación de paz entre Kiev y Moscú no resulte perjudicial para sus intereses.
Sin embargo, Salgó asegura que los países europeos «no traen nada» y cuentan con un arsenal nuclear insuficiente. «Francia y el Reino Unido tienen arsenal nuclear, pero la verdad es que Francia, más allá de lo que pueda disparar desde submarinos nucleares, no puede hacer gran cosa», dijo Salgó.
«La verdad es que Europa sin Estados Unidos es un castillo de naipes, esa es la verdad en términos militares» agregó el especialista.