Por María Ortiz
El nuevo estudio del Instituto de Impuestos y Política Económica (ITEP) tiene como objetivo ayudar a cambiar los criterios actuales, cuantificando cuánto pagaron los inmigrantes indocumentados en impuestos, tanto a nivel nacional como en cada estado, en 2022 y demostrar los beneficios que se recibirían en todo el país si los 10.9 millones de inmigrantes indocumentados recibieran permisos de trabajo.
Los debates sobre la política de inmigración plantean una amplia gama de cuestiones que son fundamentales para la vida en Estados Unidos, entre ellas, cómo la inmigración influye en su economía.
Para arrojar luz sobre sólo una de esas cuestiones, el estudio emprendió el examen más exhaustivo hasta la fecha de los pagos de impuestos federales, estatales y locales realizados por inmigrantes indocumentados y analizó las contribuciones fiscales, que ayudan a financiar nuestra infraestructura, instituciones y servicios públicos, de los 10.9 millones de inmigrantes indocumentados que viven y trabajan en Estados Unidos.
Claves del aporte económico de los inmigrantes indocumentados:
–Por cada millón de inmigrantes indocumentados que residen en el país, los servicios públicos reciben $8,900 millones de dólares en ingresos fiscales adicionales. Por otro lado, por cada millón de inmigrantes indocumentados que son deportados, los servicios públicos pueden perder $8,900 millones de dólares en ingresos fiscales.
–Dar acceso a la autorización de trabajo a todos los inmigrantes indocumentados actuales aumentaría sus contribuciones fiscales en $40,200 millones de dólares al año, hasta los $136,900 millones de dólares.
–Más de un tercio de los dólares de impuestos pagados por los inmigrantes indocumentados se destinan a impuestos sobre la nómina destinados a financiar programas, como la Seguridad Social y Medicare, a los que estos trabajadores no pueden acceder. Esto se resolvería al otorgarles permisos de trabajo.
–De manera similar, los pagos de impuestos sobre la renta de los inmigrantes indocumentados se ven afectados por leyes que les exigen pagar más que los ciudadanos estadounidenses en situaciones similares. Por ejemplo, a menudo se les impide recibir créditos fiscales significativos, como el Crédito Fiscal por Hijos o el Crédito Fiscal por Ingresos del Trabajo.
–Seis estados -California, Texas, Nueva York, Florida, Illinois y Nueva Jersey-recaudaron más de mil millones de dólares cada uno en ingresos fiscales de los inmigrantes indocumentados que viven dentro de sus fronteras.
–En una gran mayoría de estados (40), los inmigrantes indocumentados pagan tasas impositivas estatales y locales más altas que el 1% más rico de los hogares que viven dentro de sus fronteras.
Conclusiones:
El estudio concluye que los inmigrantes indocumentados aportaron $96,700 millones de dólares en impuestos federales, estatales y locales en 2022, una cifra que aumentaría drásticamente si a estos contribuyentes se les concediera el permiso de trabajo.
“Este estudio es el análisis más completo de cuánto pagan los inmigrantes indocumentados en impuestos. Y lo que muestra es que pagan bastante, alrededor de $100 mil millones de dólares al año”, dijo Marco Guzmán, analista sénior de políticas del ITEP y coautor del estudio.
“La conclusión aquí es que, independientemente del estatus migratorio, todos contribuimos pagando nuestros impuestos”.
Del total de $96,700 millones de dólares en impuestos pagados por inmigrantes indocumentados, la mayor parte ($59,400 millones de dólares) se pagó al gobierno federal, mientras que los $37,300 millones restantes se pagaron a los gobiernos estatales y locales.
Un poco menos de la mitad de esas contribuciones estatales y locales se realizan a través de impuestos sobre las ventas y los impuestos especiales (46% o $15,100 millones de dólares), mientras que el 31% ($10,400 millones de dólares) se realiza a través de impuestos sobre la propiedad y el 21% ($7,000 millones de dólares) a través de impuestos sobre la renta personal o empresarial.
Las contribuciones fiscales anuales de los inmigrantes indocumentados superan los presupuestos estatales totales combinados de Delaware, Dakota del Sur, Montana, New Hampshire, Vermont, Idaho, Maine, Oklahoma, Alaska, Iowa, Wyoming, Nebraska y Rhode Island.
Los inmigrantes indocumentados constituyen una sección más grande de la fuerza laboral a nivel nacional que la población nativa y constituyen el 4.7% de la fuerza laboral, a pesar de que representan solo el 3.4% de la población estadounidense total.
Si bien este estudio es el análisis más completo de los impuestos pagados por inmigrantes indocumentados, vale la pena señalar que no intenta cuantificar los impactos más amplios que surgen de la mayor actividad económica creada por estos individuos.
Si se tienen en cuenta esos efectos económicos en cadena, probablemente se revelaría que los inmigrantes indocumentados tienen una importancia aún mayor para los ingresos públicos de lo que se documenta aquí.
Este estudio es otro recordatorio de que los inmigrantes indocumentados están contribuyendo a nuestras economías y a nuestros servicios públicos compartidos, y que las decisiones sobre políticas de inmigración que se tomen en los próximos años tendrán consecuencias significativas para los ingresos públicos.