El texto adoptado contó con 13 votos a favor, y con dos abstenciones (China y Rusia).
Cabe precisar que fue inmediatamente “aplaudida” su adopción por parte de las máximas autoridades de Israel.. Este tipo de “aplausos” tan inmediatos (y tan entusiastas), constituye un pequeño detalle que usualmente delata la verdadera intención del texto aprobado, así como las motivaciones de sus promotores.
La resolución 2803(2025) en breve
En realidad, el texto de la resolución 2803 se limita a integrar y a saludar el denominado “Plan de Paz” que Estados Unidos e Israel presentaron al mundo el pasado 29 de septiembre del 2025, y que pretende, en 20 puntos, resolver la situación y establecer una gobernanza duradera en Gaza.
Por lo que el carácter supuestamente “histórico” como se tituló de esta resolución del Consejo de Seguridad, no se verifica en lo más mínimo, muy por el contrario.
Hace unas semanas, habíamos tenido la oportunidad de analizar los alcances de este supuesto “Plan de Paz”. Es de notar que este “Plan de Paz” fue anunciado 10 días después de un episodio ante el mismo Consejo de Seguridad: un solitario veto de Estados Unidos en el mismo Consejo de Seguridad, registrado el 18 de septiembre del 2025 frente a 14 votos a favor de un texto sobre un cese al fuego y exigiendo a Israel la entrada incondicional de la ayuda humanitaria urgente que se requiere en Gaza.
Este veto de Estados Unidos fue antecedido por la presentación de un informe el 16 de septiembre del 2025, confirmando la comisión de un genocidio en Gaza por parte de una comisión de investigación de Naciones Unidas.
Una de las modificaciones aportadas al proyecto de resolución original de Estados Unidos presentada al Consejo de Seguridad, fue la referencia que se lee en el párrafo operativo 2 de la resolución 2803 adoptada el 17 de noviembre: “After the PA reform program is faithfully carried out and Gaza redevelopment has advanced, the conditions may finally be in place for a credible pathway to Palestinian self-determination and statehood. The United States will establish a dialogue between Israel and the Palestinians to agree on a political horizon for peaceful and prosperous coexistence”;
Se trata de un aspecto omitido en el proyecto inicial de resolución sometido a la consideración de los demás 14 integrantes del Consejo de Seguridad, y que evidencia otro detalle de interés: la exacta coincidencia de criterios de la diplomacia israelí y de la norteamericana.
No obstante, la ausencia de toda referencia a la solución de dos Estados, así como la falta de precisiones sobre la composición del Board of Peace (BoP) y de la fuerza internacional de estabilización, así como sobre las medidas previstas (cronograma por ejemplo, medidas y garantías de seguridad en caso de incumplimiento) para implementar los 20 puntos de este “Plan de Paz“, son más que notorias. Estas omisiones debieron llevar a algunos columnistas, comentaristas, analistas y “expertos” a ponderar el entusiasmo que desde la diplomacia norteamericana e israelí se intentó provocar con respecto a su adopción, mediante una intensa campaña de comunicación a penas adoptada esta resolución del Consejo de Seguridad, el pasado 17 de noviembre.
Un texto que simplemente endosa un “Plan de Paz”, de por sí sumamente omiso en algunos puntos sustantivos
¿Por qué entonces “aplaudir” la adopción de esta resolución desde Israel ? Una de las razones sea posiblemente porque esta resolución adolece de toda referencia a… resoluciones previas del Consejo de Seguridad o de la Asamblea General de Naciones Unidas sobre Gaza, y más generalmente, sobre Palestina. ¿Cómo así? Como se lee.
Salvo error de nuestra parte se trata de una innovación total en la formulación de las resoluciones del Consejo de Seguridad sobre Palestina, confirmando la verdadera anomalía que constituye esta resolución 2803 de este 17 de noviembre del 2025 en la práctica seguida por el Consejo de Seguridad. Desde Israel, claro está, “aplaudamos” la complacencia de varios Estados en el Consejo de Seguridad que votaron a favor de semejante experimento que constituye en sí una verdadera innovación.