La ofensiva israelí en la Franja de Gaza continúa cobrando vidas a un ritmo acelerado. Según reportes del canal Shehab, en las últimas 24 horas, 71 palestinos fueron asesinados y 251 resultaron heridos. Esta actualización eleva la cifra total de muertos desde el inicio de la guerra el 7 de octubre de 2023 a 62,263, con 157,365 heridos. La fase más reciente de la ofensiva, iniciada el 18 de marzo de 2025, ha sido particularmente letal, con 10,717
contra civiles que buscan ayuda humanitaria. En el último día, 24 personas fueron muertos y 45,324 heridos en este periodo.
La violencia se dirige de manera alarmante asesinadas y 133 heridas en ataques a centros de distribución de ayuda, lo que incrementa la macabra cuenta conocida como «los mártires del bocado de pan» a 2,060 muertos y 15,197 heridos. Además, dos personas más murieron a causa del hambre y la desnutrición, llevando el total de fallecidos por inanición a 273, de los cuales 112 eran niños.
En un anuncio de gravedad histórica, el organismo Clasificación Integrada de las Fases de la Seguridad Alimentaria, respaldado por la ONU, declaró oficialmente este viernes que la ciudad de Gaza enfrenta una hambruna.
Esta es solo la cuarta vez que el organismo, establecido en 2004, declara una hambruna en el mundo. El informe, citado por el diario británico The Telegraph, atribuye la declaración a la verificación de que se cumplen tres criterios simultáneos: que al menos el 20% de los hogares sufren una grave falta de alimentos, que el 30% de los niños padecen desnutrición aguda y que la tasa de mortalidad diaria por hambre supera las dos personas por cada 10,000.
La crisis alimentaria se está expandiendo rápidamente. La hambruna declarada afecta actualmente a la ciudad de Gaza, tres localidades aledañas y varios campamentos de refugiados, y se prevé que se extienda a las áreas de Deir al-Balah y Khan Yunis para finales de septiembre.
Además, más de 1.7 millones de personas, más de la mitad de la población de Gaza, se encuentran en un nivel de «emergencia» de inseguridad alimentaria, la fase previa inmediata a la hambruna declarada, lo que indica que la catástrofe humanitaria está lejos de terminar.