La relatora especial de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en los territorios ocupados de Palestina, Francesca Albanese, ha pedido junto a Pineda suspender el Acuerdo de Asociación UE-Israel. Lo han hecho desde el Parlamento Europeo en una comparecencia ante la prensa para presentar su informe Anatomía de un genocidio.

“Ya se daban las condiciones para suspender este acuerdo antes del 7 de octubre», aseguró Albanese, “porque el establecimiento de asentamientos y los anuncios de anexiones de territorio palestino ya eran un crimen de guerra. El desplazamiento forzoso de ciudadanos palestinos ya era una realidad y no se han tomado medidas”.

Por su parte, Pineda calificó de “vergüenza” que “la UE aún mantenga un acuerdo de asociación cuyo artículo segundo se basa en el respeto a los Derechos Humanos; cuando es evidente que Israel no está respetando los Derechos Humanos del pueblo palestino”.

El eurodiputado de IU fue más allá y aseguró que el Parlamento Europeo le impide, en su calidad de presidente de la DPAL, hablar de genocidio o exigir la suspensión de este acuerdo. “Yo en calidad de Presidente DPAL no puedo pedir ninguna de esas cosas porque este Parlamento Europeo todavía no reconoce que se está cometiendo un genocidio y no ha tomado ninguna acción contra este régimen”, aseveró.

“Tengo que ocultar hasta aquello que la ONU y la Corte Internacional de Justicia reconocen; que es que Israel está llevando a cabo un genocidio contra la población palestina de Gaza”, dijo.

En esta línea, Albanese expuso el informe que recientemente ha presentado ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, coincidiendo con Pineda en calificar como “genocidio” la situación que se vive en Palestina.

Hemos encontrado tres indicios de la comisión del delito de genocidio: primero, el asesinato de miembros de un grupo concreto; en segundo lugar, ha causado daño físico y mental a miembros de ese grupo; y, por último, ha infligido de forma deliberada daño a ese grupo con el objetivo de empeorar en su totalidad o en parte sus condiciones de vida».

Exigen un embargo de armas

Además de pedir la suspensión del Acuerdo de Asociación, Pineda y Albanese coincidieron en exigir que se aplique un embargo a Israel sobre la compra y venta de armas.

“A través del programa Horizonte Europa estamos financiando a las empresas que fabrican los drones con los que se asesina a los niños palestinos”, señalo Pineda, “y recientemente la UE concedió más de 8 millones de euros para investigación militar al mayor fabricante de armamento israelí”.

Una política que en opinión del eurodiputado sitúa a Bruselas como “cómplice del genocidio”.

Pineda resaltó además que en seis meses la Eurocámara “no ha sido capaz de aprobar un embargo o el llamamiento a un alto el fuego inmediato, incondicional y duradero”.

Por su parte, la relatora pidió “un embargo de armas y petróleo a Israel, así como otras medidas económicas y políticas, incluidas sanciones. Éstas deben imponerse tanto a los actores estatales como a los no estatales para garantizar un alto el fuego permanente, que, por cierto, también ha sido ordenado por el Consejo de Seguridad”.