El Espectador Noviembre 21, 2024
Como respuesta a la declaración de Pablo Beltrán sobre la idea de negociar la paz con próximos gobiernos, Petro sentó posición a través de su cuenta en X y descartó la idea. “La verdad no creo que haya próximo gobierno que haga la paz con el ELN. La historia es un flujo permanente y no se repite”, señal.
Según detalló Pablo Beltrán, en medio de una explicación de 13 puntos sobre el futuro de los diálogos de paz con el Gobierno de Petro, “la meta inmediata es avanzar lo máximo posible, hasta 2026, cuando concluye el presente Gobierno, y dejar este proceso lo más avanzado posible para que próximos gobiernos le den continuidad”.
El jefe negociador de la guerrilla se refirió al tema en la antesala a la reunión con el Gobierno para descongelar la mesa.
La declaración de Beltrán se enmarca en el compromiso que firmó el Gobierno y la guerrilla del ELN en el acuerdo número 15 de diciembre de 2023, en donde se comprometen a avanzar hasta el máximo punto durante el periodo de Gustavo Petro en la presidencia.
“El Gobierno de la República de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), hemos acordado avanzar al máximo durante el presente Gobierno (…) Igualmente, es necesario generar las condiciones para que los acuerdos y las transformaciones sean política de Estado respaldada por la sociedad, autoridades e instituciones, incluyendo próximos gobernantes, dando continuidad y sostenibilidad a los acuerdos alcanzados”, se lee en el documento firmado por ambas delegaciones.
Sin embargo, la premisa de continuar en otros gobiernos tampoco fue bien recibida por el consejero comisionado Otty Patiño, quien fue enfático en que la implementación se debe lograr máximo en 2025. “Si el proceso de implementación (del ELN) no empieza en el 2025 habremos fallado y el proceso tiene tres componentes: transición a la vida civil, transformación territorial y desescalamiento del conflicto”, explicó.
Lo cierto es que desde el Ejecutivo han reiterado la necesidad de volver a la mesa de negociación y, de hecho, el comisionado Patiño dijo que el presidente Petro ya le había advertido al ELN que todas las peticiones se pueden dialogar en la mesa, pero que no discutirá “con un fusil en la mano”.
Si bien la guerrilla busca que en el periodo presidencial de Petro se logre avanzar en la consolidación del proceso. El plan sería firmar la paz en futuros gobiernos. Pero eso no sería del todo seguro.
Cabe recordar que el 7 de febrero de 2017 iniciaron los diálogos de paz en Quito entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y el ELN, hasta que casi un año después, en enero de 2018, Santos decidió suspender los diálogos a raíz de una serie de atentados por parte de esa guerrilla. Meses más tarde, el ELN anunció que seguiría con los diálogos en el próximo Gobierno.
Pero al llegar Iván Duque a la presidencia anunció que no iba a continuar los diálogo con el ELN y luego con el atentado a la Escuela de Cadetes de Policía General Francisco Santander de Paula, esa puerta se cerró definitivamente.
En ese contexto, el presidente Petro también detalló que “todos y todas las combatientes del ELN saben hoy, precisamente por qué la historia es un río con muchas derivas, que se escoge el camino del padre Camilo Torres Restrepo y su amor eficaz, o el camino de Pablo Escobar. El pueblo colombiano los quiere en el camino del padre que ofreció su vida por los demás. Esto mismo me lo dijo personalmente el mismo Pablo Beltrán y se lo escuché al comandante Pizarro”, concluyó.
La próxima reunión en Cuba es la continuidad a la puerta que se abrió hace unas semanas para que el Gobierno y el ELN reanudaran los diálogos, tras una larga crisis que inició por acusaciones de esa guerrilla hacia el Gobierno por, supuestamente, no cumplir los acuerdos y con un ultimátum para que se diera trámite a ciertas peticiones.
Ahora, tras el primer encuentro para reanudar el proceso, se espera que los diálogos regresen con una mejor estrategia que pueda evitar la inactividad en la que cayó la negociación antes de que se suspendiera el proceso. Vale recordar que, aunque la pausa inició formalmente en septiembre, desde mayo no había ninguna reunión entre las partes.
Ante las constantes peticiones para que se dé un giro en este proceso, el propio mandatario anunció que se tomaron medidas.
“Con el ELN hemos decidido buscar el cambio del método del diálogo. Estoy de acuerdo en que las opciones políticas que crean que han llegado tiempos para el poscapitalismo, existan pacíficamente en Colombia. En el mundo ya crecen fuertes relaciones de producción poscapitalistas sin necesidad de guerras. El poscapitalismo no se decreta, se hace”, explicó Petro a través de su cuenta de X.