En 2024 la situación mundial continuará complicada e impredecible, con una feroz competencia estratégica y una escalada de conflictos en muchas áreas, señaló el jefe de Gobierno vietnamita al presentar ante la Asamblea Nacional (Parlamento) un informe sobre el desarrollo socioeconómico del país.

Minh Chinh puntualizó que los precios de la gasolina y los fletes oscilan marcadamente, la recuperación económica y comercial es lenta e inestable, la inversión global total disminuye y los desastres naturales, el cambio climático y la seguridad energética son complicados.

En medio de este complejo escenario, enfatizó, Vietnam alcanzó muchos resultados importantes, superiores a los del mismo período en la mayoría de los campos.

Para 2024 se alcanzarán y superarán 14 de los 15 objetivos, señaló antes de destacar que el referido al aumento de la productividad laboral superó el plan, después de tres años sin poder lograrlo. En cuanto al Producto Interno Bruto (PIB) per cápita explicó que éste podrá cumplirse si el PIB nacional crece por encima de un siete por ciento.

Minh Chinh ratificó que en los primeros nueve meses del año la macroeconomía continúa estable, la inflación está controlada, el crecimiento económico es superior al objetivo fijado y los equilibrios importantes están garantizados (con superávits elevados).

El crecimiento del PIB en ese periodo fue de un 6,82 por ciento, por lo cual se estima que para todo el año alcanzará entre un 6,8 y siete por ciento, cifra superior a la meta asignada por la Asamblea Nacional (6 – 6,5), evaluó.

Apuntó asimismo que el mercado de divisas es básicamente estable y los tipos de interés están bajando, los ingresos del presupuesto estatal alcanzaron el 85,1 por ciento de lo estimado, y el comercio internacional llegó a 578,5 mil millones de dólares, con un superávit de casi 20,8 mil millones.

La seguridad energética y la seguridad alimentaria están garantizadas, y el mercado laboral se recuperó positivamente, señaló antes de reconocer que aún persisten limitaciones e insuficiencias y se enfrentan muchas dificultades y desafíos.

En ese sentido mencionó que los costos de producción se mantienen altos y el poder adquisitivo interno muestra signos de desaceleración, algunos programas y políticas de crédito se implementan lentamente, y la deuda incobrable tiende a aumentar.

El desembolso de capital de inversión pública es lento, el despilfarro en la gestión de bienes públicos es cuantioso, los trabajos de compensación, limpieza del lugar y reasentamiento todavía llevan mucho tiempo, y el contrabando y el fraude comercial son acontecimientos complicados.

Agregó que las instituciones y las leyes todavía tienen muchos problemas que resolver, la calidad de los recursos humanos no está a la altura de las exigencias, especialmente en las industrias de alta tecnología, y el trabajo de formación no alcanza aún las nuevas exigencias en materia de utilización de mano de obra y necesidades de desarrollo.