Además, condenó enérgicamente la violación israelí del alto fuego con Hamas, la continuación de las masacres, el bloqueo, el cierre del paso de Rafah y el impedimento de la entrada de la ayuda humanitaria a la Franja.
El líder yemení también se refirió a las revelaciones sobre la tortura de prisioneros palestinos y el robo de sus órganos, afirmando que estos actos exponen las dimensiones horrendas de las atrocidades cometidas.
En este contexto, criticó duramente el silencio de algunos países árabes frente a estos crímenes, señalando que las protestas globales en apoyo a Palestina han recibido una respuesta débil y tímida por parte de dichos gobiernos.
Al-Houthi extendió su advertencia al Líbano, afirmando que los esfuerzos del enemigo para desamar a la Resistencia en ese país representan una grave amenaza para la seguridad regional.