“Hacemos un llamado a la unidad de las bolivianas y los bolivianos y también a la unidad de nuestro continente americano del Abya Yala para que seamos fuertes ante un contexto internacional cambiante y que se orienta a un destino multipolar y, junto a ese llamado a la unidad, también una convocatoria a resolver nuestras diferencias y tensiones sociales, políticas, económicas y culturales a través de la cultura de la paz, unidad y paz social hacia el Bicentenario”, dijo el mandatario durante la ceremonia de apertura del Año del Bicentenario, en la ciudad de Sucre, Chuquisaca.
El jefe de Estado resaltó que el Bicentenario es una oportunidad para reflexionar temas históricos y rescatar la memoria, porque Bolivia es un país soberano que resistió saqueos y poderes coloniales “alzándose firme ante propios y extraños, protegiendo su dignidad”.
“Invoco a sentirnos orgullosos de nuestras riquezas, tradiciones y pluralidad cultural artística, turística, gastronómica. Este sentimiento colectivo debe plasmarse en una renovación de fe en la construcción de nuestro Estado Plurinacional de Bolivia, en abierta oposición a las nuevas formas de colonialismo que se dan en la actualidad, pero guiados por un mismo propósito incompatible con el derecho de los pueblos a su libre autodeterminación, que es el explotar nuestras riquezas para beneficio de los muy pocos que tienen demasiado, mientras nuestros pueblos continúan siendo explotados y oprimidos”, manifestó.
Mencionó que, con el inicio del Proceso de Cambio, se emprendió el camino de recuperar para el pueblo a través del Estado el control de los recursos naturales y ahora se está dando el salto histórico que se necesita, la industrialización.
“Sabemos que es un tránsito y tenemos dificultades, pero será más fuerte nuestra convicción y con la sabiduría del pueblo lograremos la industrialización como dos formas: económica y política de avanzar hacia nuestra segunda y definitiva independencia. Ese espíritu que iluminó a nuestros próceres y héroes (…) debe prevalecer en esta fecha tan significativa”, remarcó.
Enfatizó también que es responsabilidad de las autoridades del Estado mostrar lo mejor que tiene el país en turismo, cultura y riqueza patrimonial e histórica, “pero sobre todo manteniendo la unidad de Bolivia, la democracia como principio de convivencia y paz social”.
“El Bicentenario de Bolivia es un acontecimiento extraordinariamente importante en nuestra historia, por eso es un honor estar aquí en la insignia Casa de la Libertad de la ciudad de Sucre, la capital de nuestro Estado Plurinacional de Bolivia, para compartir este espacio con las autoridades del Bicentenario, que llegaron de diferentes partes del país”, expresó.
El objetivo de la ceremonia es revalorizar el patriotismo y fortalecer la identidad nacional mediante los símbolos patrios, en una ceremonia simbólica que promueva la unidad y cooperación entre autoridades locales, nacionales e internacionales.