Reuters informó que los manifestantes izaron banderas nigerianas y portaron pancartas en inglés pidiendo que la nación norteamericana abandone el país.

La manifestación ocurrió en un momento en que el país de África Occidental se aleja de una estrecha cooperación con Washington en los esfuerzos antiterroristas y recurre a Moscú en busca de seguridad.

Níger era un socio de seguridad clave para Francia y Estados Unidos, que lo utilizaban como base como parte de los esfuerzos internacionales para frenar una insurgencia islamista de una década en la región del Sahel en África occidental.

Los manifestantes también creen que los rusos son parte de una cooperación beneficiosa para todos.

Por su parte, los funcionarios estadounidenses dijeron que el Consejo Militar gobernante en Níger aún no ordenó sus fuerzas retirarse, pero la llegada de los efectivos del gigante eslavo complica su permanencia en el país.

Según la publicación, no está claro si las fuerzas de la nación norteamericana se marcharán ni cuándo.

El verano pasado, algunas fuerzas de élite entrenadas por Estados Unidos participaron en un golpe de estado que derrocó al presidente electo y desde entonces, las relaciones entre los nuevos líderes de Níger y Washington se deterioraron.

La región del Sahel Central alcanzó niveles elevados de violencia en 2023, y el número de muertes resultantes del conflicto en la región aumentó un 38 por ciento en comparación con el año anterior.

Una fuente del gobierno de Níger confirmó a la agencia Sputnik que la Casa Blanca debe presentar una propuesta con un calendario para la retirada, porque después de cancelar el acuerdo de cooperación militar, las fuerzas estadounidenses ya no tienen derecho a realizar ningún entrenamiento o movimiento en el territorio.