En una carta dirigida a la misión permanente de Siria y a los representantes de misiones internacionales en la OPAQ, Berlín 21 manifestó que el director general de la organización “tomó nota” de su revisión, pero hasta ahora no proporcionó una respuesta sustantiva a las cuestiones planteadas.
La carta destacó que desde entonces, un informe sobre la controversia en torno a la OPAQ y el incidente de Duma 2018 salió a la luz, centrado en las irregularidades cometidas por la organización en sus investigaciones en Siria.
El informe sugirió recuperar la credibilidad de la OPAQ al asegurar su total cumplimiento con la Convención sobre Armas Químicas, y exhortó a la alta dirección a abordar las preocupaciones planteadas por los ex expertos de la OPAQ, Brendan Whelan e Ian Henderson.
Asimismo, la misiva enfatizó aspectos de procedimientos y sustantivos de su revisión previa sobre el incidente, además de los hallazgos del informe de los parlamentarios europeos, destacando:
—En junio de 2018, el informe original de la misión de investigación fue alterado secretamente en el último momento, y sus principales conclusiones fueron ocultadas, mientras se insinuó de manera engañosa, sin evidencia científica, el uso de gas cloro. Este incidente confirma que uno o más funcionarios de la OPAQ conspiraron para intentar publicar un informe científicamente engañoso.
—El informe toxicológico original presentado por expertos en guerra química de la OTAN indicó que las 43 víctimas civiles no murieron por gas cloro, resultado que fue posteriormente ignorado. En el informe del Equipo de Investigación e Identificación de 2023 se presentaron alegaciones engañosas para sugerir lo contrario.
—Los informes de la OPAQ adoptaron un patrón de tergiversaciones, ignoraron testimonios inconvenientes, exageraron análisis químicos y ocultaron estudios científicos importantes. Estas deficiencias científicas en los informes de la OPAQ sobre el incidente de Duma significan que la alegación central de que había motivos razonables para el presunto ataque con armas químicas es inexacta y que las misiones de investigación estaban operando claramente fuera del marco de la Convención sobre las Armas Químicas.
—Las misiones de investigación de la OPAQ son mecanismos temporales sin procedimientos acordados en ningún tratado intergubernamental, y carecen de transparencia y rendición de cuentas, y siendo controladas exclusivamente por la oficina del director general, lo cual crea oportunidades para influencias políticas indebidas.
El grupo Berlín 21 instó a las misiones permanentes ante la OPAQ a apoyar su lucha contra estas irregularidades y obtener respuestas del director general sobre las cuestiones planteadas.
Solicitó la designación de un comité científico a través del consejo asesor de la OPAQ para evaluar su revisión y todas las evidencias disponibles.
Berlín 21 envió previamente cartas a diversas autoridades, incluido el secretario general de la ONU, y exigió la corrección de estos graves errores en los informes de la OPAQ sobre el incidente de Duma en 2018.
Asimismo, el grupo afirmó que continuará su llamado al secretario general de la ONU para que rompa su silencio sobre este tema, crucial para la paz y la seguridad internacionales.