“Toda la estructura de Hezbolá está viva y está luchando”, dijo en una reunión con los estudiantes basiyíes de las universidades de todo el país.
De este modo, Qalibaf, ha destacado la incapacidad del ejército israelí a la hora de hacerse con el control de la zona sur del Líbano y las grandes bajas que ha sufrido en los combates de hace más de un mes en dicha región.
Conforme resaltó, “el régimen sionista ha sido derrotado estratégicamente y militarmente en la guerra híbrida. La filosofía de existencia del régimen sionista era que, durante 75 años de ocupación, afirmara que esta tierra era la más estable y segura del mundo, y con esa premisa reunió a gente de todo el mundo en ese territorio”.
“El lema de Israel durante el último año fue la destrucción de HAMAS y la liberación de los retenidos, pero ahora, en el aniversario del 7 de octubre, HAMAS sigue lanzando cohetes y tampoco ha logrado [Israel] liberar a los suyos”, ha dicho.
Denunciando el apoyo de EEUU a los sionistas en sus crímenes, Qalibaf señaló que “las armas y municiones especiales que anteriormente Estados Unidos proporcionó a Israel fueron para cometer las atrocidades que hoy presenciamos. Ellos querían que Israel realizara estos crímenes”, agregó.
Hezbolá ha perdido a su líder, Seyed Hasan Nasralá, y muchos de sus comandantes de alto perfil en los últimos meses durante ataques indiscriminados israelíes en algunas partes del Líbano.
Sin embargo, el grupo ha intensificado los ataques a los objetivos sensibles israelíes desde septiembre -cuando el régimen incrementó las agresiones a las zonas residenciales e instalaciones civiles en el este y sur del Líbano-, asegurando que el asesinato de sus líderes no socavará la determinación del movimiento para continuar la lucha y alcanzar la victoria.
En este sentido, Hezbolá destacó el jueves sus buenas condiciones en el campo militar y prometió mantener en alto la bandera de la Resistencia hasta alcanzar la victoria.