En su discurso ante los participantes en la Cumbre de los Movimientos de Liberación celebrada en Johannesburgo, el presidente de Sudáfrica y líder del Congreso Nacional Africano reafirmó el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación y la solidaridad de su país con esta causa.
Asimismo, los mandatarios de Zimbabue, Namibia y Mozambique, además del representante de Tanzania, confirmaron en sus intervenciones el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación, según indicó SPS.
Por su parte, el secretario general del Congreso Nacional Africano, Fikile Mbalula, transmitió su discurso inaugural de la Cumbre de los Movimientos de Liberación, un fuerte mensaje de solidaridad con el pueblo saharaui, en el que llamó a una «movilización renovada africana e internacional para poner fin a la ocupación marroquí del Sáhara Occidental».
Al respecto, la agencia saharaui subrayó que «en un discurso caracterizado por su profundidad histórica y alta sensibilidad hacia las cuestiones contemporáneas, Mbalula vinculó directamente las luchas palestina y saharaui, criticando el doble rasero en el escenario internacional y la incapacidad del sistema de Naciones Unidas para resolver los conflictos persistentes y las ocupaciones extranjeras».
Al abordar la cuestión del Sáhara Occidental, Mbalula condenó la continuación de la ocupación marroquí del territorio, considerándola «una flagrante violación de la unidad y la soberanía africanas».
Recordó que las acciones de Marruecos «demuestran desprecio por numerosas resoluciones de la Organización de la Unidad Africana y su sucesora, la Unión Africana, y representan el comportamiento de una potencia colonial respaldada por ciertos actores en nuestro continente que han sido engañados mediante políticas de sobornos».
Mbalula instó a los participantes a traducir la solidaridad con el pueblo saharaui en «acciones concretas que conduzcan al ejercicio efectivo de su derecho a la autodeterminación», reiterando el compromiso firme del Congreso Nacional Africano de que «la cuestión del Sáhara Occidental no es solo un conflicto regional, sino una verdadera prueba del compromiso del continente con la justicia, la liberación y la solidaridad africana».
Cabe mencionar que la Cumbre de los Movimientos de Liberación centró los debates en estrategias para resistir el neocolonialismo, reforzar la cooperación Sur-Sur y defender los derechos de los pueblos oprimidos.