Por Enrique Santiago
Las maniobras, especializadas en operaciones cazaminas, se desarrollan en aguas de la Reserva de la Biosfera Marina de Menorca, un enclave reconocido por la UNESCO por su valor ecológico. Explosiones, tráfico naval intenso y contaminación acústica se dan cita en un entorno que debería estar protegido, no militarizado.
El portavoz de Izquierda Unida en el Congreso, Enrique Santiago, ha presentado una batería de preguntas dirigidas al Gobierno para esclarecer cómo se ha permitido este despliegue. “¿Se están empleando explosivos en una reserva marina? ¿Se ha evaluado el impacto ecológico? ¿Se ha tenido en cuenta la presencia de especies vulnerables?”, cuestiona Santiago, que advierte del riesgo de que este tipo de maniobras pongan en peligro ecosistemas frágiles, además de chocar frontalmente con la sensibilidad de la población balear.
Reclamamos al Gobierno que abandone de una vez esta alianza militar que contamina nuestro entorno y amenaza la soberanía de muchos países.
Menorca ha demostrado en múltiples ocasiones su rechazo a las maniobras militares y a la presencia de la OTAN. En un contexto de creciente tensión internacional, Santiago alerta del riesgo de seguir subordinando los intereses del país a los objetivos estratégicos de Estados Unidos y reclama avanzar hacia una Europa verdaderamente autónoma, sin bases militares ni dependencias bélicas.
“Necesitamos menos OTAN y más diplomacia. Menos guerra y más vida”, concluye el diputado. Y deja sobre la mesa una advertencia: no se puede hablar de transición ecológica, defensa del medio ambiente o soberanía popular mientras se permite que nuestros mares se conviertan en escenarios de guerra.