Por Javier Collins Agnew
En un comunicado conjunto, representantes de distintas confesiones religiosas hicieron un llamado urgente a las autoridades, movimientos sociales y actores políticos para que revisen el lenguaje y las formas en que se dirigen al país y entre sí.
“El respeto, la mesura y la responsabilidad en la palabra y en las acciones son condiciones necesarias para construir puentes”, indicaron.
El Comité exhortó a que se respete el Estado de Derecho, se garantice el debido proceso y se evite el uso excesivo de la fuerza, al considerar que esto último solo “agrava las heridas del pueblo».
Asimismo, enfatizaron la necesidad de iniciar procesos auténticos de diálogo y encuentro. “No es momento de imponer visiones unilaterales ni de responder a los conflictos con violencia. Es tiempo de escuchar el clamor del pueblo, de abrir espacios donde se dé voz a quienes no la tienen y de buscar salidas justas y sostenibles para todos”, señala el comunicado.
El Comité Interreligioso advirtió que la seguridad y el orden no deben sostenerse sobre la represión, sino sobre los pilares de la justicia, la inclusión y la verdad.
También reconocieron que la actual crisis tiene raíces profundas vinculadas a modelos económicos, sociales y políticos excluyentes que han privilegiado a pocos y marginado a muchos.
“Requerimos de una transformación ética y estructural en favor de la dignidad humana”, puntualizaron, al tiempo que invitaron a las comunidades religiosas a seguir orando y trabajando por la paz, y a la ciudadanía a no caer en la desesperanza.
“No hay situación que no pueda superarse si caminamos juntos con fe, honestidad y amor por nuestra patria”, concluye el pronunciamiento.